Según un extenso informe de ATA, la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos, los trabajadores autónomos se dan de baja por enfermedad la mitad que los trabajadores asalariados.
En el pasado año, 2017, solo el 0,96 % de los autónomos se dieron de baja por enfermedad, lo que se denomina por incapacidad temporal, IT; frente al 1,95 % de los asalariados; es decir, justo la mitad.
Por otra parte, el tiempo de baja de los autónomos fue de media 92 días, lo que significa que solo se dan de baja cuando su enfermedad es realmente grave y saben que van a estar largo tiempo sin poder trabajar; sus bajas son más largas.
De ahí que ATA haya pedido que los autónomos estén exentos de seguir pagando a la Seguridad Social a partir del día 30 de la baja, porque con lo poco que suelen percibir de ayudas resulta un verdadero problema la obligación de seguir pagando la cuota si no tienen ingresos. La única salida que compensa esta situación es tener contratado un seguro de incapacidad laboral, porque lo que cobra un autónomo estando de baja es claramente insuficiente.
Para conocer en profundidad los datos publicados por ATA, conviene leer el informe sobre las bajas de los autónomos.
Un comentario
Que tontería.
Se puede decir que no tenemos baja laboral.
Directamente no es una opción.